"... después de todo nuestras vidas no son sino secuencias de accidentes: una cadena estrepitosa de sucesos fortuitos. Una serie de elecciones, casuales o deliberadas, que se suman a esa gran calamidad que llamamos vida..." Rohinton Mistry en Un perfecto equilibrio.

"- Lo único que quiero es encontrar la esposa apropiada y reservarla para mi sobrino.
-Como un billete de tren -dijo Maneck, y Om se echó a reir.
-Tienes la fea costumbre de reirte de cosas que no comprendes -dijo Ishvar" Rohinton Mistry en Un perfecto equilibrio.

" ... las sábanas huelen tan mal que procuras no sacar el culo del rectángulo donde has dejado tu toalla. Pero tú también hueles mal. No sudas, eres sudor. Vas pasando a un ritmo acelerado del estado sólido al estado líquido, y tus fluidos ya no saben a tí, saben a la India" Eugenia Rico en En el país de las vacas sin ojos

martes, 3 de noviembre de 2009

BATU CAVES

Pues va pasando el tiempo, y sigo en esta ciudad... Me sigue sin gustar, pero parece que le estoy cogiendo un poco el puntito. Para ir a cualquier sitio me pierdo un par de veces, pregunto otras tantas, me indican mal otras tropecientas, pero eso si, siempre con una sonrisa... y cuando consigo llegar donde quiero voy toda mojada, o del sudor o del Monzon, porque lo dificil de este pais es estar mas de cinco minutos en la calle seca. Es imposible!!

Esta manyana he estado en las Batu Caves. Estan a las afueras de Kuala, pero casualmente, el autobus que va para alla, para enfrente de la Guest House infecta donde estoy. Las cuevas son un santuario hindu, con pequenyos altares distribuidos por su interior. Dentro, los fieles y turistas se mezclan con los monos, pollos, ratas, palomas... y demas animales que se mueven por alli sin importarles la presencia de humanos. Ahora ya estoy haciendo la mochila otra vez; Kuala me ha decepcionado, con dos dias se puede tomar el pulso a la ciudad y hacer de turista en las Petronas, regatear en Little India, comprar falsificaciones de todo tipo en Chinatown, callejear rodeada de grandes edificios, entrar en un centro comercial abarrotado de gente, comer exquisita comida autoctona y charlar con gentes de todo el mundo. Ha llegado la hora de huir de esta ciudad y subir para el norte... hacia GeorgeTown, y de alli, al ferry que por fin me llevara a Sumatra!

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