PHNOM PENH

Ya estoy en Phnom Penh... y me gusta esta ciudad y este pais!!! Ya tenia ganas de ciudad, tiendas, mercados, caos... y ha sido todo un acierto cambiar de planes y estar aqui ahora.

Todo el dia de ayer lo pase metida en un autobus. Con aire, asientos comodos, sin vecino al lado... pero por unas carreteras infernales!!! Llenas de baches, de decenas de puentes construidos con tablas de madera, de tramos sin asfaltar, y por supuesto a toda velocidad, adelantando a todo lo que se ponia por delante... A ambos partes de la carretera, gente viendo pasar la vida, y extensiones interminables de arrozales, que en epoca lluviosa deben estar verdes, pero que ahora eran de un color pajizo bastante triste....











Pensaba que esta parte del viaje lo iba a hacer sola, pero dos de los argentinos se vinieron y acabamos en la misma GuestHouse... ya nos habiamos despedido, porque yo queria alojarme por la zona del rio, un poco mas cara, pero mas centrica; pero al final el tuk-tuk hizo lo que le dio la gana y nos dejo a los tres en el mismo sitio, en la zona del lago. Como estabamos cansados no discutimos y nos metimos en la zona mas ruidosa y de mayor concentracion de turistas de toda la ciudad. Toda la noche oyendo gritos, musica y gente muy pasada de todo... asi que una noche y no mas! Y ahora ya me he buscado un hueco en la zona del rio por 5 dolares.

Me gusta descubrir las ciudades cuando despiertan, pillarles el pulso desde que amanece, asi que a las siete ya estaba buscando una moto-taxi que me llevara al centro de la ciudad. He desayunado, y a las ocho ya estaba en la puerta del Royal Palace, pero... mala suerte, no me han dejado entrar! Sabia que exigian vestir con discrecion, asi que cogi el panyuelo que va conmigo a todas partes para cubrirme los hombros, y toda entera si hace falta, pero, no esta permitido usar panyuelo. Cada vez eramos mas chicas, con nuestros panyuelos, intentando hacer presion para entrar, pero no ha habido nada que hacer. La unica solucion que nos daban era comprar una camiseta en la tienda de souvenirs a un precio exagerado... asi que lo deje para manyana, y fui al Museo Nacional, que no vale la pena: representaciones de Buda de todas las epocas, tamanyos y materiales... mas de lo mismo....



Despues, paseo con tuk-tuk por la ciudad hasta el Museo del Genocidio. Increible sentir lo que pueden transmitir unos muros, unas celdas, unas cadenas que han sido testigos de brutales torturas y asesinatos. Una sensacion de frio recorria todo mi cuerpo estando a mas de cuarenta grados.... inexplicable... Lo que habia sido un colegio, se convirtio en 1975 en el S-21. Cuatro edificios divididos en celdas de 0.8 x 2 metros donde los presos eran detenidos, interrogados, torturados y asesinados salvajemente. Alli se escribio parte de la historia mas triste del pais.