PRUEBA SUPERADA!!

Por fin vuelvo a ser persona, bueno... o medio persona, porque los mosquitos se han comido casi la mitad de mi, tengo picotazos por todo el cuerpo!!!

Me enganyaron!! Yo queria hacer un trekking facilito, amable, visitando aldeas, campos de arroz... y me ofrecieron el de la jungla. Me lo vendieron como "same-same" (aqui usan esa coletilla para decir que dos cosas son iguales, pero realmente no te fies, porque no tienen nada que ver), facil, mas fresquito (era mas al norte de Luang Prabang), el alojamiento era en aldeas, habia otras dos personas apuntadas, con lo cual era mas barato... asi que me fie y lo acepte.

Y... por dios... el primer dia me queria morir!!! Despues de comer, tres horas de subida horrible que parecian no tener fin, bajo un calor peor que un dia de agosto a las cuatro de la tarde en Valencia que me hacia sudar hasta por las pestanyas, sin ningun arbol alrededor, con dos botellas de agua para todo el dia... Cada vez que paraba, las piernas me empezaban a temblar y era incapaz de pararlas, tenian vida propia... y yo solo repetia: no puedo, no puedo....

Pero... si pude! Y la recompensa fue infinitamente mas grande que todos los momentos malos que pase (que no fueron pocos), lo que he vivido estos dias no tiene precio.

Llegamos a un poblado de la etnia Hmongs; dedicados basicamente a la cria de ganado, y que viven en las zonas altas de las montanyas. Unas cuantas cabanyas de barro y bambu, sin electricidad, sin agua corriente, y un monton de ninyos y animales corriendo por las calles... Y a partir de ahi empezo lo mejor del dia: banyo necesario en el rio, compartir cena y suelo con una familia del poblado, probar el whisky de arroz en la "cantina" del lugar.... y simplemente sentarme y mirar el cielo, vi mas estrellas que jamas en la vida!!! En ese momento ya no sentia cansancio, ni me dolian las piernas, ni las picaduras... simplemente, era feliz viviendo ese momento! Por la noche solo se escuchaban sonidos de cerdos, pavos, vacas, perros, pollos.... que corrian por las calles, y por supuesto, para despertar, un perfecto concierto de gallos! Alguien puede pedir mas...?

A la manaya siguiente, el poblado se lleno de actividad... cada uno sabia muy bien lo que debia hacer. Los hombres debian dar de comer a los animales, los ninyos ir a por agua al rio, las mujeres preparar comidas... todo con mucha calma, bajo el sol abrasador y bajo una perfecta organizacion. Y nosotros empezamos la aventura por la selva... ese dia llovio, y dormimos en un refugio en mitad de la nada, bajo las estrellas, completamente tapados por el saco-sabana, la mosquitera de cara, la de cuerpo... intentado enganyar a los bichos, pero sin conseguirlo.

El ultimo dia visitamos varios poblados de las zonas bajas de las montanyas, donde vive las etnia de los miens. Se dedican al cultivo del arroz mediante el sistema de tala y quema, y ahora que empieza la estacion de lluvias, estaban en plena campanya de plantacion del arroz.
Hace un rato hemos vuelto a Luang Prabang, y he podido ducharme en la GuestHouse de un catalan que conoci antes del trekking, que se ofrecio a guardarme mi mochila y dejarme usar su ducha a mi vuelta... He estado media hora bajo el agua, he tirado toda la ropa que he usado estos dias, y ahora, como no tengo casa, estoy haciendo tiempo, porque a las siete sale un bus que en diez horas, me llevara a Vientiane, la capital de Laos... creo que voy a echar de menos esta ciudad, me ha encantado!